lunes, 25 de noviembre de 2013

Islandia, la tierra de hielo, fuego y ovejas


Hace ya un tiempo que no publicamos nada, pero entre vacaciones, depresión postvacacional, mudanza y otros proyectos hemos estado bastante liados.
Prometemos que no volverá a pasar e intentaremos resarcirnos con nuestro post sobre Islandia (que lo que no resarza Islandia...)

Así que nuestra primera entrada después de las vacaciones se la dedicamos, como no, AL VIAJE. Sí, en mayúsculas, porque después de volver pensamos que debe haber pocos sitios tan bonitos.

Siempre nos había llamado la atención Islandia, y sinceramente, nunca nos lo imaginamos como en realidad es. Nosotros nos imaginamos más hielo y más frío. Para nada los paisajes verdes, cascadas y rios que nos hemos encontrado allí.

Después de nuestra experiencia autocaravanera en Asturias y Cantabria, y nuestra ruta por Escocia con los amigos nos apetecía un tercer road trip. Estuvimos valorando el coger una autocaravana, pero nos decantamos por una furgoneta básica por aquello del precio, Islandia es un país carete. Tenia menos comodidades, sin baño ni cocina, pero ambos coincidimos una vez de vuelta en que repetiríamos este viaje mil veces.

Tras una exhaustiva búsqueda de furgoneta encontramos la mejor opción en Kukucampers.

Parte de atrás del edificio de Kuku

Es una empresa muy divertida ubicada Reykjavik. Tienen una flota de furgonetas tuneadas a cual más graciosa con la parte de atrás preparada para dormir, compartimentos con nevera, mesa, frisbee... todo lo que necesitábamos para pasar 11 días sin echar de menos demasiado una cama de verdad (aunque sí que echamos de menos un MP3 o un triste reproductor de CD, un coche con casette en estos tiempos debería tener multa).
Os recomendamos si estáis pensando viajar a Islandia que cojáis el vehículo con ellos. De precio no hay color, y encima son majísimos.

LAS RUBIAS NO SOMOS TONTAS, R - U - ... RUBIAS!

Con todo el viaje organizado y bien amarradito desde España salimos el 22 de Agosto dirección Reykjavik, donde la niebla y la lluvia nos recibieron ya entrada la noche y nos acompañarían todo el viaje dándonos un respiro de tres días. No nos quejamos, no esperábamos otra cosa y es parte del encanto de este pais.
Los detallitos de Reykjavik
 
Escultura que representa una barca vikinga, en Reykjavik


El día 2 de nuestro viaje vimos un poco de la capital, recogimos a la Dolly y empezamos a hacer kilometros.

Detalle de la Ring Road. A bici por carril
Nuestra ruta de viaje consistió en seguir la Ring Road (la carretera nacional, que rodea la isla) tomando carreteras secundarias cuando era posible. Lo hicimos en el sentido contrario a las agujas del reloj. Con un todoterreno nos podríamos haber intentado aventurar por pistas forestales (las carreteras marcadas con la letra F) que unen la isla por el centro y llevan a los glaciares, pero después de pasar tramos de grava, esquivar ovejas y casi no caber por el carril en la carretera nacional nos pareció que estaba bien de emociones. Si la Ring Road es como hemos visto no quiero imaginarme las pistas forestales que anuncian sólo aptas para 4x4s.

Nuestra primera parada fue la ruta turística del Golden Circle. Donde se encuentra Thingvellir, parque nacional de gran importancia histórica (por ser el valle donde se fundó y se reunía el Althing, el primer parlamento de Islandia y uno de los primeros del mundo, allá por el año 930) y también geográficamente, por albergar la fisura que pone en evidencia la separación de las placas continentales de Eurasia y America. Aquí es tan obligatorio hacerse una foto espatarrado con un pie en cada "continente" como lo es en Pisa sujetando la torre.
El círculo dorado de Islandia lo completan la catarata de Gulfoss y el valle de Haukadalur, donde se encuentran los geisers de Strokkur y Geysir (que dió nombre a este fenómeno natural).
Geysir recién erupcionado y sus turistas

Pensábamos que ver el geiser en erupción iba a ser como ver la aurora, pero no, al menos en nuestra presencia salía el chorrazo cada 10 minutos. Debía ser el día del espectador, y menos mal, porque es algo impresionante en persona.


Después de ver el Golden Circle pusimos rumbo a los famosos restos de un avión del ejercito estadounidense que se estrelló y ya se ha convertido en un reclamo tirístico. Es bastante dificil llegar, porque está en un campo de tierra enorme y no se puede llegar en coche si no es un 4x4. Así que con las coordenadas en el gps aparcamos a la Dolly en la cuneta en la carretera y nos metimos campo a través. Caminata de 50 minutos sin saber muy bien donde íbamos, metidos en una niebla espesa que no nos dejaba ver nada a medio kilometro y calados hasta los huesos por una lluvia fina y agobiante. Finalmente apareció el avión delante nuestra como un espejismo y mereció la pena. A la foto nos remitimos.

Avión estrellado en medio de la nada
Volvimos a la furgoneta con unas ganas locas de resguardarnos de la lluvia y seguimos con la ruta alternando cataratas, ovejas, playas de arena volcánica, ovejas, desiertos de lava, ovejas, glaciares...
Playa de Vik donde se ahoga el prota del video "I love you" de Woodkid


Catarata de Svartifoss con sus columnas basálticas
Y por fin llegamos a uno de los sitios más famosos de Islandia, el lago Jokulsarlon. Es el lago glaciar más grande del pais, formado en la lengua del glaciar Breiðamerkurjökull.

Al fondo se ve la lengua del glaciar.
Los volcanes erupcionaban, se quedaba ceniza sobre el glaciar, se creaba más hielo encima, más ceniza, más hielo... Y eso da lugar a los icebergs con capas de ceniza milenaria característicos de esta zona.



Dimos un paseo en vehículo anfibio por el lago que nos permitió hacer estas fotos tan cerca de los icebergs


Los desprendimientos de icebergs del glaciar y su cercanía con la playa lo hacen el sitio más impresionante que hayamos visto. Tanto que decidimos pasar la noche junto al lago y buscar foquitas en la oscuridad (que las hay y se dejaron ver).
50 euros al que se meta en el agua

Sesión nocturna en la playa
Después de hacer noche junto al lago nos pusimos en ruta de nuevo, no sin antes coger un trozo grande de hielo glaciar que nos dijeron que al ser más puro tarda más en derretirse. Nos aguantó todo el viaje en la nevera enfriándonos las latitas, fijaos si es puro.

Después del hielo le tocó el turno a las preciosas carreteras de los fiordos del este, pero eso os lo seguiremos contando en el próximo post, que aquí hay mucha miga y no queremos dejarnos cosas interesantes sin contar ni fotos chulas sin poner.  

Continuará...

comentarios en Facebook